Descubre nuestra amplia gama de cosméticos naturales para cara y rostro: cremas, aceites, serum, bálsamos, champús y muchos más.
La cosmética natural y biológica, se fundamenta en el respeto por lo que verdaderamente es nuestra piel: un órgano vivo, formado por una incesante actividad celular, metabólica, de nutrición y eliminación de toxinas.
La piel es el órgano más grande que poseemos, formada por 3 capas que se superponen: la epidermis, la dermis y la hipodermis o tejido graso subcutáneo. En las que encontramos, además de las células epidérmicas, células del sistema inmune, melanocitos, células del sistema nervioso, fibroblastos y adipocitos. Además a la piel se agregan otros sistemas anexos, como son el sistema pilo-sebáceo, las glándulas sudoríparas, las glándulas apocrinas y las uñas.
La piel posee diferentes funciones que son el reflejo de su comunicación con el interior y el exterior; por un lado es un órgano de protección y barrera frente al exterior, pero que al mismo tiempo responde a los cambios que se dan en el interior. Además posee una función sensitiva, puesto que a lo largo de toda su superficie contiene receptores sensitivos de tacto, temperatura, dolor, que nos permiten reconocer la intensidad y procedencia de los estímulos. La piel posee también funciones metabólicas, de reserva y es un órgano de gran complejidad inmunológica.
La Piel constituye en realidad una barrera viva, que interacciona constantemente con el medio externo e interno en el que se encuentra. El aspecto de la piel manifiesta pues todo lo que sucede en nuestro interior, a nivel metabólico, hormonal, intoxicación, estrés o estado anímico, cansancio…etc…. Pero además la piel se ve influenciada por factores externos o medioambientales, tales como la contaminación, el aire puro, el sol, la humedad, el viento etc…. además de los cuidados que podamos proporcionarle nosotros.
Nuestra salud y por ende la de nuestra piel es el fiel reflejo de nuestro equilibrio bioquímico, depende por un lado de los alimentos y líquidos que ingerimos, del aire que respiramos, pero también de todo aquello que penetra a través de nuestra piel, es decir de todas aquellas sustancias contenidas en los cosméticos empelados para el cuidado de la piel.
La cosmética natural y ecológica, tiene como objetivo actuar a nivel celular, reestablecer el medio en el que se haya la célula, y aumentar su valor defensivo.
Redescubre un mundo de texturas, aromas y auténtica efectividad que te conectarán con tu misma esencia.